PRAGA (Sputnik) — Según Sobotka, el cierre de la ruta balcánica, aunque es un "mensaje muy potente de la UE para los traficantes y sus clientes", puede provocar que los inmigrantes irregulares intenten entrar en el territorio comunitario a través de otros países como Italia.
"Deberíamos actuar en este caso de la misma manera (que en Grecia), en particular interceptando los barcos de los traficantes, y en caso necesario a esta zona debería desplazarse la operación de la OTAN", aseveró.
El jefe del Gobierno checo también llamó a alcanzar acuerdos similares al logrado con Turquía con otros países que los "sin papeles" atraviesan para llegar a Europa.
"En cuanto en Libia exista un Gobierno más estable, habrá que pactar con él la devolución de inmigrantes irregulares; se podría llegar a acuerdos similares con otros países del norte de África", dijo.
El pasado viernes los Veintiocho dieron el pasado viernes la luz verde al preacuerdo logrado con Turquía el 7 de marzo.
La declaración final de la cumbre prevé que la UE devuelva a Turquía a partir del 20 de marzo a los nuevos inmigrantes en situación irregular que lleguen a las islas griegas vía Turquía.
Por cada inmigrante que retorne, la UE se compromete a aceptar un refugiado sirio, acelerar la liberalización de los visados para nacionales turcos y las negociaciones sobre el ingreso de Turquía en el bloque europeo, así como el pago de 3.000 millones de euros adicionales para finales de 2018 a fin de ayudar a Ankara a combatir la crisis migratoria.