CUIDAD DE MEXICO (Sputnik) — "Lo que encontré al llegar a la Presidencia de la República, fueron varios Estados, municipios y ciudades donde había un proceso de captura del Estado, que estaba en marcha y creciendo", respondió este miércoles Calderón (2006-2012), en entrevista con el noticiario nacional Imagen Multimedia.
Al contrario, "por no combatirlos, México se vio penetrado e invadido por un cáncer terrible, que es el crimen organizado, que convirtió al Estado en enemigo de la sociedad", dijo Calderón al responder al secretario federal de Gobernación (Interior), Miguel Angel Osorio.
La guerra contra las drogas lanzada por Calderón partió de un diagnóstico equivocado, sin considerar el enorme mercado y nuevas políticas en EEUU, dijo el martes el responsable de la política de Seguridad al clausurar el Tercer Foro sobre el Uso de la Mariguana, en ese Estado norteño, fronterizo con EEUU.
Reconquista del Estado
Calderón ha respondido al responsable de la política del Gobierno de Enrique Peña Nieto que "México necesita "una reconquista de las instituciones que cayeron en manos de criminales y hay que recuperarlas para la sociedad".
La estrategia antidrogas buscaba "que se cumpliera la ley y se combatiera a los criminales", dijo Calderón, quien lanzó a las Fuerzas Armadas a las calles a tareas de seguridad pública, cuando las policías municipales y de las 32 provincias de la república fueron rebasadas en extensas zonas del país latinoamericano.
Calderón afirma que la captura de instituciones del Estado por criminales "explica casos terribles", como los 43 estudiantes de la escuela de Ayotzinapa desparecidos en Iguala, de comerciantes que dejaron los Estados de Guerrero y Michoacán, de ganaderos acosados en Tamaulipas en la frontera con EEUU, casos en los cuales el crimen opera coludido con agentes policiales.
Si el diagnóstico es que solo es un tema de drogas ese el tema equivocado –prosiguió–: "en la legalización es importante avanzar, pero con ella o sin ellas, la gran equivocación es suponer que simplemente con ellas se van a resolver los problemas de seguridad y de violencia".
Otro diagnóstico equivocado es suponer que la acción del Estado provoca la violencia –añadió–: "lo que provoca la violencia es la expansión en algunos casos por ignorancia y negligencia o franca complicidad la expansión territorial de las organizaciones criminales".
Responder sobre las implicaciones de regular o no la marihuana deben hacerse "de cara al mercado estadounidense, cuyo marco normativo está cambiando", y donde se concentra la cuarta parte de la demanda mundial de drogas, dijo el alto cargo del Gobierno federal.