"Reprimiremos decididamente toda actividad separatista relacionada con la llamada independencia de Taiwán, no importan sus formas", dijo el líder chino citado por la agencia Xinhua.
El 16 de enero se celebraron las elecciones del gobernador de la isla china de Taiwán, que fueron ganadas por la candidata del opositor Partido Democrático Progresista (PDP), Tsai Ing-wen.
Pekín sigue celosamente la actividad de Taiwán que aboga por independizarse de la China continental, el problema se agravó con la llegada al poder de la candidata por el PDP.
Tsai Ing-wen declaró anteriormente que las dos partes de China divididas por el estrecho de Taiwán asumen la responsabilidad por encontrar formas de coexistencia mutuamente aceptables y también dijo que la isla debería unirse al Acuerdo Transpacífico de Cooperación Económica, creado a iniciativa de EEUU.
Las relaciones entre el Gobierno central de la RPCh y la provincia insular se interrumpieron en 1949, después de que las fuerzas de Kuomintang, derrotadas en la guerra civil librada contra los comunistas, se retiraran a Taiwán.
Unos contactos empresariales y extraoficiales se reanudaron a finales de la década del 80 y a partir de la del 90 empezaron a contactar entre sí unas ONGs.
Las relaciones comenzaron a mejorar a partir de 2008 tras la llegada al poder del Partido de Kuomintang, con Ma Ying Jeou a la cabeza, quien fue criticado por su actitud benévola hacia Pekín por la oposición de ánimos independentistas.
Durante el gobierno de Ma Ying Jeou se firmaron varios acuerdos importantes en los sectores de turismo y negocios, aunque no se logró un notable progreso político.