Los policías allanaron el domicillo particular del expresidente brasileño Luiz Inácio Lula da Silva. Le detuvieron y llevaron bajo custodia para prestar declaraciones hacia la sede de la Policía Federal en San Pablo.
Las pruebas de beneficios ilícitos recibidos por el exmandatario están en manos de la Policía, informó la misma en un comunicado.
"El expresidente Lula, además de ser el líder del partido, fue el responsable final de la decisión sobre quiénes serían los directores de Petrobras y fue uno de los principales beneficiarios de estos delitos", dijo la Policía.
La operación comenzó a las 7:40 de la mañana, hora local. Según escribe el diario Folha, Lula da Silva reaccionó tranquilamente cuando los policías tocaron a su puerta. Cerca de la casa de Lula se organizaron dos mítines espontáneos: uno a favor y otro en contra de la detención del político.
A PM separa os manifestantes pró e contra #Lula na porta do prédio onde mora o ex-presidente, em São Bernardo. pic.twitter.com/rWoRmUVfYB
— Rádio BandNews FM (@radiobandnewsfm) 4 марта 2016 г.
Según los medios locales, las manifestaciones acabaron en enfrentamientos con los cuerpos de seguridad del Estado.
#AHORA | Reportan enfrentamientos entre policías y manifestantes frente a la casa de Lula Da Silva #Brasil pic.twitter.com/RaEYyIVdvQ
— teleSUR TV (@teleSURtv) 4 марта 2016 г.
Los allanamientos fueron ordenados por el juez federal Sergio Moro, quien lleva la causa sobre una red que se apropió ilegalmente de unos 2 mil millones de dólares de las arcas de la petrolera estatal.
Además de Lula da Silva, esta etapa de la Operación Lava Jat investiga también a su esposa, Marisa, sus hijos Marcos Cláudio, Fábio Luís, Sandro Luís y su nuera Marlene Araujo.
En la lista de investigados se encuentra también el empresario Fernando Bittar y el presidente del Instituto Lula, Paulo Okamotto. Entre las empresas investigadas están la compañía de construcción OAS y Gamecorp, propiedad del hijo de Lula da Silva, Fabio Luis.
La semana pasada, Lula da Silva rechazó insinuaciones de corrupción, y acusó a la prensa y la oposición de difundir "mentiras, filtraciones y acusaciones de criminalidad".
La Policía llamó a una rueda de prensa para las 4 de la tarde, hora local.
