Moscú, 26 feb (Sputnik). — "Nos queda mucho más por hacer juntos. (…) La seguridad nuclear es un asunto que termina nunca", declaró Nunn en una entrevista a la emisora rusa Ejo Moskvi.
La labor, declara, no se puede asegurar "sin la colaboración entre EEUU y Rusia", de ahí que "el trabajo esté lejos de haber concluido".
Sam Nunn en los años 90 junto con su colega del Congreso, Richard Lugar, desarrolló un programa que incluía la ayuda de Estados Unidos a los países de la antigua URSS para el reciclaje de residuos nucleares.
"El programa Nunn-Lugar tuvo un objetivo específico para un determinado período de tiempo. Ahora tenemos que avanzar con la misma firmeza, ya con otros socios", dijo el exsenador.
Según él, Estados Unidos y Rusia que poseen el 90 por ciento de las armas nucleares y de los materiales de fisión "tienen un objetivo especial, una misión especial" ante sus propios ciudadanos y toda la humanidad, que es" trabajar juntos para prevenir el uso de armas nucleares en cualquier forma ".