En conferencia de prensa minutos antes del comienzo del cierre de los recintos, la presidenta del Tribunal Supremo Electoral, Katia Uriona, destacó que la jornada se desarrolló con "absoluta normalidad" pese a incidentes aislados.
En la ciudad de Santa Cruz (centro), votantes quemaron papeletas como protesta por la demora en la apertura de las mesas.
Uriona afirmó que, pese a ello, hubo una "participación activa y pacífica de la población", aunque no brindó porcentajes de afluencia a las urnas.
Está previsto que a las 18.00 hora local (22:00 GMT) se dé inicio al cómputo oficial de votos y que dos horas después se conozcan resultados preliminares.
Más de 6,2 millones de bolivianos estaban convocados a las urnas este domingo para decidir sobre una reforma constitucional que podría permitir una nueva postulación del presidente Morales.