WASHINGTON (Sputnik) — "Estamos sumamente preocupados por los datos fidedignos de que un numeroso grupo de soldados del Ejército de Sudán del Sur entró en el campamento y abrió fuego contra los civiles que allí buscaban refugio", declaró la asesora de Seguridad Nacional de la Casa Blanca, Susan Rice.
Asimismo, las autoridades estadounidenses exhortan a Sudán del Sur a investigar "este acto de violencia, identificar a los responsables y llevar a los tribunales a los criminales".
EEUU condenó el ataque y llamó a las autoridades de Sudan del Sur a respetar el acuerdo sobre el armisticio y la formación de un Gobierno provisional.
La víspera la ONG Médicos Sin Fronteras denunció el ataque contra un campamento de la ONU en Malakal que se saldó con 18 muertos y 36 heridos.
Sudán del Sur, que proclamó su independencia en 2011, vive una guerra civil desde diciembre de 2013, cuando el presidente Salva Kiir Mayardit acusó al exmandatario, Riek Machar, de organizar un golpe de Estado.
El conflicto ocasionó numerosas víctimas y puso el país al borde de una catástrofe humanitaria.
En 2014 el Gobierno y los rebeldes hicieron varios intentos para poner fin al conflicto, pero ninguno de los acuerdos se respetó.