Eirik Vold presentó los datos de su investigación en sus intervenciones en La Paz y en Sucre, a las que asistieron líderes políticos, periodistas y movimientos sociales, según la Agencia Boliviana de Información.
“Los cables WikiLeaks, se tratan de los intentos por parte de los diplomáticos de Estados Unidos en La Paz de extorsionar al gobierno de Evo Morales y a Bolivia con la amenaza de cortar la ayuda de desarrollo económico y aceptar continuar con las políticas anteriores de los modelos neoliberales”, señaló el investigador.
Vold llegó a tal conclusión tras estudiar los documentos de WikiLeaks de 2006 a 2009. Uno de ellos contiene información de que Estados Unidos consideró probable que se produjera un magnicidio contra Evo Morales en el año 2008 y, sin embargo, no advirtió de ello al gobierno boliviano. También calculó la posibilidad de un golpe de Estado.
Además, según datos de WikiLeaks, la Agencia para el Desarrollo Internacional de EEUU (USAID, por sus siglas en inglés) entregó cuatro millones de dólares al movimiento autodeterminista de la región de la Media Luna —Santa Cruz, Tarija, Beni y Pando—, una región oriental del país rica en hidrocarburos que ocupa casi la mitad del territorio boliviano y se distingue de los departamentos andinos por su mayoría blanca y mestiza. Las agrupaciones violentas se proponían volar partes de un gasoducto para obligar al gobierno a aceptar la separación de la zona.
Otro de los documentos menciona que el periodista liberal Carlos Valverde, en 2007, se puso en contacto con la embajada norteamericana para alertar que Evo Morales pretendía dar un autogolpe, disolver el parlamento y gobernar por decreto.
Según las estimaciones de Vold, existen más de 174 mil documentos confidenciales publicados por WikiLeaks sobre América Latina. Esto confirma la importancia que tiene la región dentro de la política exterior de EEUU. La lista de documentos filtrados de América Latina la encabeza Venezuela, mientras que Bolivia ocupa el octavo lugar con 14 mil documentos.
La estrategia utilizada por Washington, sostuvo el investigador, está orientada a “crear, sembrar división e impedir esa integración regional, ese aumento de cooperación que se ha visto en la última década”.
El experto precisó que la diplomacia estadounidense ha escrito los documentos filtrados y no políticos conservadores o de derecha ni organismos de inteligencia.
“Te dejan como impresión y ellos escriben textualmente que su meta es volver a tener la hegemonía en América Latina”, subrayó el investigador.
Siendo un país soberano y rico en recursos, especialmente de hidrocarburos, Bolivia es uno de los objetivos principales para recuperar la hegemonía norteamericana en América del Sur, según los documentos publicados por WikiLeaks, concluyó Vold.
La revelación de los documentos sobre Bolivia emitidos por WikiLeaks se dio justo de cara al referéndum del 21 de febrero donde los bolivianos determinarán si modifican o no la Constitución del Estado para posibilitar al presidente Morales participar en los comicios generales de 2020.