La corte distrital de La Haya revisa el recurso que presentó Rusia contra el fallo que le obliga a pagar esta suma multimillonaria.
Moscú estima que la Corte de Arbitraje no tenía potestad para revisar la demanda de los antiguos accionistas, ya que el Parlamento ruso nunca aprobó la Carta de la Energía.
"Es indudable que Rusia es solo signataria, pero no está relacionada con los contratos", explicó el abogado Albert Jan van den Berg que representa al país en los procesos internacionales por el caso Yukos.
En julio de 2014, la Corte de Arbitraje de La Haya satisfizo la demanda de los antiguos accionistas de Yukos que exigían a Rusia una indemnización de 50.000 millones de dólares.
Las autoridades del país recurrieron la decisión, pero los demandantes acudieron a los tribunales de otras naciones.
A mediados de junio de 2015 Francia y Bélgica arrestaron bienes y cuentas consideradas por las autoridades de estos países como rusas, en cumplimiento de la sentencia de la Corte de Arbitraje.
En 2003, las autoridades rusas imputaron evasión fiscal y otros delitos económicos a los dueños de la entonces mayor petrolera privada del país, entre ellos Mijaíl Jodorkovski.
Posteriormente Yukos se declaró en quiebra y sus activos fueron adquiridos por la empresa pública Rosneft.