"Las labores de habilitación de la frontera ruso-ucraniana se realizaron en 2015 en las regiones de Chernígov y Járkov; se crearon unos fosos antitanque de 230 kilómetros de longitud, una valla metálica de 72 kilómetros y unas carreteras alternativas de 115 kilómetros", dice el texto del informe.
Además, a lo largo de la frontera se instalaron 32 torres de vigilancia y un sistema de vigilancia electrónica y óptica.
Según el informe, Ucrania asignó 15,7 millones de dólares para estos trabajos.
Anteriormente, el presidente de Ucrania, Petró Poroshenko, declaró que Kiev instalará en la frontera con Rusia un moderno sistema de fortificaciones.
Más tarde el primer ministro ucraniano, Arseni Yatseniuk, anunció el comienzo de la realización del proyecto llamado Stená (muro), proponiendo después llamarlo Barrera Europea.