"Si se logra la implementación de las medidas propuestas, definitivamente voy a apoyar la permanencia (en la UE)", dijo.
A la vez, no descartó la celebración de un referéndum sobre la salida o la permanencia en la Unión Europea a lo largo del año en curso.
Según una reciente encuesta, el abandono del bloque cuenta con el apoyo del 50 por ciento de los británicos.
Donald Tusk, propuso anteriormente a los países comunitarios un mecanismo para enmendar la legislación supranacional.
Según el proyecto, si el 55 por ciento de los parlamentos nacionales apoyan enmendar un acto legislativo en un plazo de 12 semanas desde su introducción, el Parlamento Europeo tendrá que abordar las propuestas.
Los cambios que exige el Reino Unido son principalmente cuatro: proteger a los Estados no incluidos en la Eurozona; otorgar mayor poder a los Parlamentos nacionales para poder bloquear las leyes comunitarias; no incluir a Reino Unido en el proyecto de mayor integración política; y limitar durante cuatro años el acceso a beneficios sociales para los inmigrantes llegados de la UE.