La entrada en Ramala solo está permitida a los residentes, a los palestinos de Israel —con carné de identidad y pasaporte israelí- y a los palestinos de Jerusalén este, que tienen permiso de residencia israelí, así como a los extranjeros.
El Ejército israelí decidió imponer el bloqueo sobre Ramala para los palestinos no residentes, unas horas después de que un policía palestino de Ramala disparara contra unos soldados israelíes en un control militar y los hiriera.
Esta es la primera vez que el Ejército israelí impone el cierre parcial de Ramala desde que empezó la ola de violencia a principios del pasado mes de octubre.
La medida ha perjudicado a miles de palestinos que trabajan en Ramala o necesitan desplazarse a la ciudad por numerosos motivos.
Durante el día se han visto largas colas en algunos controles militares en carreteras de acceso a la ciudad.