"Fueron presentadas serias acusaciones contra altos dirigentes rusos sin presentar ninguna prueba, todas las conclusiones se basan en declaraciones de testigos seleccionados, personas sesgadas y testimonios clasificados", dijo Lavrov.
El jueves pasado se hizo público el informe del juez Robert Owen sobre el caso Litvinenko, que vuelve a responsabilizar a Rusia de la muerte del exagente en 2006 por envenenamiento con polonio 210.
Moscú rechazó las conclusiones de Owen y las calificó de políticamente motivadas.