"Creo que los europeos levantarán las sanciones antes que los estadounidenses, pero tengo dudas de que se produzca a mediados de este año debido a la presión que ejerce EEUU", dijo Kaláshnikov.
El diputado apuntó que en Washington no se perfilan ánimos reales para derogar las restricciones.
"En Europa hay voluntad para levantar las limitaciones por el gran intercambio comercial entre nuestras economías y la enorme dependencia (…)", señaló el parlamentario.
Al mismo tiempo, advirtió que hay cierto juego de por medio.
"Los funcionarios de mediano calibre abogan por la eliminación de las sanciones, mientras que los funcionarios políticos, de alto nivel, hacen oídos sordos, y esto puede continuar indefinidamente", remarcó.
Las relaciones entre Rusia y Occidente se deterioraron a raíz de la crisis en Ucrania que estalló tras el derrocamiento del presidente Víctor Yanukóvich en 2014, un hecho que Occidente reconoció como "legítimo", mientras que Moscú lo calificó de golpe de Estado.
EEUU, la UE y otros países occidentales aprobaron varios paquetes de sanciones contra ciudadanos, empresas y sectores enteros de la economía rusa, a lo que Moscú respondió con un veto agroalimentario.