Los familiares de las víctimas holandesas del derribo del MH17 escribieron una misiva al primer ministro de esa nación, Mark Rutte, donde expresaban su protesta ya que los investigadores no tuvieron acceso a los datos primarios de los radares ucranianos y rusos.
Los investigadores holandeses confirmaron haber recibido determinados datos de radares tanto de Ucrania como de Rusia, pero afirmaron no haber recibido los datos primarios de los radares de ambos países.
Según informó el octubre pasado el subdirector de la entidad aeronáutica de Rusia, Rosaviatsia, Oleg Storchevoy, la parte rusa presentó a la comisión en Holanda los datos tanto de la información primaria como la secundaria de los radares.
"Además les entregamos la información sobre las comunicaciones de centro de control de vuelos ruso con el centro ucraniano de Dnepropetrovsk, así como las conversaciones con las naves aéreas que nos solicitó la comisión", declaró en aquella ocasión.
El de 17 de julio de 2014 un Boeing 777 de la compañía Malaysia Airlines con 298 personas a bordo, que volaba de Ámsterdam a Kuala Lumpur, fue derribado en la provincia de Donetsk, en el este de Ucrania, donde el Ejército gubernamental libraba combates contra las milicias.
Kiev responsabilizó de la catástrofe a las milicias de la autoproclamada República Popular de Donetsk.
Estas rechazaron las acusaciones al afirmar que no disponían de armas capaces de derribar un avión a más de 10.000 metros de altura.