Estados Unidos "es quien ha aumentado en los últimos años cinco millones de barriles diarios entre crudo y gas de fracking (producción de hidrocarburos por fracturación de esquistos) y animado o permitido producción contra sus rivales", incluso los del grupo terrorista Daesh (autodenominado Estado Islámico), comentó Paravisini, docente universitario de Economía y Energía.
El anuncio deprimió aún más los precios del barril, que cayeron por debajo de los 30 dólares en la última semana.
Dos años atrás, el barril de crudo se cotizaba a 100 o más dólares.
La producción iraní "no es la causante de la caída en los precios petroleros, sino la sobreoferta aupada por Estados Unidos para afectar a países rivales o independientes como Rusia, Venezuela o el propio Irán", dijo Paravisini, integrante de los equipos de asesoría económica del presidente Nicolás Maduro.
En esos productores independientes "Venezuela puede encontrar aliados adicionales para una política correcta, que es la de pactos entre los productores para apuntalar el mercado y los precios", señaló.
El presidente Maduro anunció que Venezuela insistirá en reunir a los países que integran la Organización de Países Exportadores de Petróleo, así como a aquellos países productores de crudo que están fuera de la organización, para acordar medidas que puedan apuntalar el mercado y subir los precios del crudo.