“Es un asunto que va para muy largo y que puede durar años; eso depende también, por supuesto, de la coyuntura política general porque una sentencia legítima directa es imposible”, explicó a RIA Novosti.
Según el experto, existen muchas circunstancias que impiden una devolución rápida del oro escita a Crimea.
Al mismo tiempo, se puede decir que en estos momentos las piezas “están en manos responsables”, agregó.
“En adelante, las cosas van a depender en gran medida de cómo se desarrolle el diálogo ruso-europeo y la situación política en general”, expresó.
Cerca de 2.000 piezas de oro escita viajaron a la galería Allard Pierson de Ámsterdam, donde se instaló la muestra 'Crimea: oro y secretos del Mar Negro' a principios de febrero de 2014, antes de que la península se separara de Ucrania y se reunificara con Rusia.
Desde entonces las partes no logran decidir a quién devolver la colección.
Cuatro museos crimeos presentaron una demanda colectiva contra la galería holandesa exigiendo cumplir el contrato firmado y devolver las piezas a Crimea.
El Tribunal Distrital de Ámsterdam encargado del caso decidió en noviembre no celebrar audiencias y continuar el proceso a través de intercambio de cartas entre las tres partes del litigio, los museos de Crimea, la galería Allard Pierson de Ámsterdam y el Gobierno de Ucrania.