En 2007 la perra del presidente ruso entró en la habitación donde se llevaban a cabo las negociaciones entre Putin y Merkel y la canciller le tuvo miedo.
Varios medios de comunicación extranjeros escribieron en aquel entonces que el mandatario ruso lo hizo a propósito ya que sabía que la canciller le tenía miedo a los perros, después de que le mordiera un perro en 1995.
"Desde luego, no, no sabía nada de esto", dijo Putin en una entrevista con el diario alemán Bild.
Explicó que "al contrario, quería hacer algo que la agradara cuando le mostré a mi perro".
El líder ruso añadió que "luego le pedí perdón por esto".
La labrador retriever Koni asistió a muchas reuniones que se celebraron en las residencias de Vladímir Putin, incluidas las de Sochi y de Novo-Ogariovo.