Los policías implicados en el asalto aseguraron que Melhem, que es palestino de Israel, les disparó con un arma del mismo tipo que la que se utilizó en los ataques de hace una semana, y ellos respondieron y lo mataron.
Melhem era sospechoso de haber asesinado a tiros a dos personas en un bar en el centro de Tel Aviv y después de matar a un taxista en el norte de la ciudad cuando huía. Siete personas resultaron heridas en el ataque al bar.
El sospechoso cumplió una condena a cárcel por atacar a un soldado israelí y tratar de quitarle el arma en venganza por la muerte de su primo a manos de la policía.
El primer ministro israelí, Benjamín Netanyahu, felicitó a la policía y a los servicios secretos del Shin Bet por la muerte de Melhem. Netanyahu afirmó que la policía actuó “implacablemente, metódicamente y de forma profesional para localizar y neutralizar al terrorista”.
“La eliminación del terrorista (…) demuestra una vez más que el Estado de Israel perseguirá hasta el final a los malhechores a cualquier sitio, dentro del Estado, en sus fronteras o incluso más allá”, indicó Yaalon.
Un pariente de Melhem explicó que un gran número de fuerzas policiales rodeó el vecindario de Azharat, en Arara, en el norte de Israel, y luego fue casa por casa en busca del sospechoso.
Tras la muerte de Melhem, diversos jóvenes salieron a la calle para protestar. “Con sangre, con fuego vengaremos al mártir”, coreaban algunos.