La comisión egipcia que investiga la catástrofe del avión ruso A321 publicó este lunes un informe preliminar en el que afirma no haber encontrado hasta ahora pruebas de que el aparato se estrellase por un atentado.
Anteriormente, las autoridades egipcias afirmaron que se abriría un caso penal y la Fiscalía general se ocuparía de la investigación en caso de que la comisión investigadora obtuviera datos concretos de un atentado a bordo del avión.
Klintsévich hizo además un llamado a "no juzgar con excesiva severidad" a los egipcios, ya que "en el mundo actual cada país tiene sus propios intereses".
El Airbus A321 de la aerolínea Kogalymavia, que volaba de Sharm el Sheikh a San Petersburgo, se estrelló el 31 de octubre en la península egipcia del Sinaí a raíz de la explosión de un artefacto a bordo, según la versión oficial de Moscú.
Los 217 pasajeros y siete tripulantes, en su inmensa mayoría ciudadanos rusos, murieron en el siniestro, el peor de la historia de la aviación civil rusa.