El diplomático subrayó que el país cuenta con la infraestructura necesaria para aumentar el turismo, y Atenas hará todo lo posible para vencer los obstáculos.
"Muchas cosas dependen no solo de Grecia como país, sino de Grecia como miembro de la UE, donde, como resultado de la ola migratoria, se está poniendo en duda la propia existencia de la zona de Schengen", destacó.
Anteriormente Turquía era el principal destino turístico para el mercado ruso, ya que la presencia de turistas rusos creció de manera ininterrumpida en los últimos años, pasando de los 2,7 millones de viajeros en el año 2009 a los 4,5 millones del año pasado, según datos de Euromonitor.
El segundo país favorito de los rusos era Egipto, con 2,5 millones de llegadas anuales de vacacionistas.
Sin embargo, estos dos destinos se vieron afectados tras el atentado que sufrió un avión ruso que volaba de Sharm El Shekh (Egipto) a San Petersburgo, y el posterior conflicto diplomático con Turquía tras el derribo en Siria del avión ruso.
El presidente ruso, Vladímir Putin, ordenó suspender los vuelos rusos con destino a Egipto y prohibir a los operadores turísticos la venta de paquetes turísticos a Turquía.
Por otra parte, desde el 14 de septiembre de este año en Rusia funciona un nuevo sistema de obtención de visados Schengen, el cual exige la presencia del viajero para entregar datos biométricos, norma que ha disminuido el número de clientes de las agencias de viaje con destino a Europa, según reporta la Asociación de Operadores Turísticos de Rusia.