El evento tuvo lugar en la empresa Krimenergo, de la ciudad de Simferópol, encargada del abastecimiento de electricidad de la península.
Unos 1,6 millones de personas se quedaron sin luz eléctrica, las escuelas y guarderías cerraron, los habitantes de la península comenzaron a sufrir los efectos de los apagones programados.
Los partidarios ucranianos del bloqueo de Crimea impidieron la reparación de las torres dañadas, pero el pasado 24 de noviembre la empresa ucraniana Ukrenergo anunció el comienzo de las obras.
La primera línea disminuirá considerablemente el déficit de electricidad, mientras la segunda línea, cuya puesta en marcha está prevista para mayo de 2016, permitirá cubrir por completo las necesidades de Crimea.
Las autoridades de la península presentarán una demanda contra los responsables ucranianos del bloqueo energético, entre ellos los líderes del autodenominado Congreso del Pueblo Tártaro de Crimea, Mustafa Cemilev y Refat Chubárov, el coordinador de ese bloqueo Lenur Isliamov y sus cómplices.