"El ciclo de vida de las armas es de 20 a 30 años, hemos entregado la Bulavá y ya estamos trabajando en modernizarlo", dijo.
Es un proceso continuo, agregó, "se aparecen soluciones fundamentalmente nuevas de diseño y construcción, que permiten aumentar la eficacia del uso de armas".
El cohete se hará más eficaz y menos costoso, concluyó.
Bulavá es un misil ruso de tres etapas emplazado en submarinos que utiliza combustible sólido. Es el arma principal de los sumergibles del proyecto 955 clase Boréi.
En septiembre de 2013, durante las pruebas de homologación del submarino Alexandr Nevski, tuvo lugar un lanzamiento fallido de Bulavá y el ministro de Defensa ordenó realizar cinco lanzamientos adicionales.