"Se trata de un acuerdo de carácter político, no vinculante desde el punto de vista jurídico y aprobado en otras circunstancias internacionales; insistimos en equilibrar el nivel de seguridad", afirmó este miércoles Waszczykowski al periódico Gazeta Wyborcza.
El canciller polaco confirmó que buscará la anulación del Acta fundacional Rusia-OTAN de 1997, aunque admitió que "Alemania considera que esto será interpretado como una actitud de confrontación contra Rusia".
"Surge entonces la pregunta a Alemania sobre qué le inquieta más, ¿un Estado aliado, que es miembro de la OTAN y la UE, o un Estado que está fuera de esas estructuras y lleva a cabo ya la tercera guerra mundial contra Georgia, Ucrania y ahora en Siria?", declaró Waszczykowski.