EEUU comenzó a combatir a Al Qaeda en 2001, y "nos llevó bastantes años antes que fuimos capaces de eliminar a Osama bin Laden y el resto de la cúpula, y neutralizarlos como una fuerza eficaz", recordó tras una reunión a puerta cerrada con congresistas.
"Esperamos acabar con Dáesh mucho más rápido y creemos que tenemos la capacidad para hacerlo", afirmó, empleando un nombre alternativo con el que se conoce al grupo yihadista.
Al mismo tiempo, Kerry pidió paciencia, ya que EEUU "siempre ha dicho que eso va a llevar tiempo".
"Estoy seguro de que destruiremos al EI si nos mantenemos firmes", concluyó.
El Estado Islámico es actualmente una de las amenazas más graves para la seguridad de Oriente Próximo y el mundo entero.
El grupo yihadista, que podría tener en sus filas entre 50.000 y 200.000 combatientes, controlan vastas zonas de Irak y Siria y pretende extender su influencia en el norte de África, particularmente en Libia.
Actualmente no hay un frente único para combatir al El, al que se enfrentan, por un lado, las fuerzas gubernamentales de Siria e Irak, y por el otro, los kurdos de ambos países y una coalición internacional encabezada por EEUU.
Desde finales de septiembre, las posiciones yihadistas en Siria son bombardeadas también por la aviación rusa, que lanzó una operación en el país árabe a petición de su presidente, Bashar Asad.