"Debemos reconocer que por muy preparados que estemos, por muy fuertes que seamos, nos enfrentamos en Reino Unido a la misma amenaza", declaró el primer ministro, David Cameron.
"Revisaremos nuestros planes … y aprenderemos las lecciones apropiadas porque está claro que la amenaza (islamista) está evolucionando", dijo Cameron.
El jefe del gobierno británico explicó que los "ataques de anoche sugieren un nuevo grado de planificación y de coordinación y un mayor propósito de causar un masivo número de víctimas".
El aeropuerto de Gatwick fue evacuado durante varias horas y un viajero fue detenido portando un paquete que infundó sospecha.
Scotland Yard intensificó además la visibilidad de sus agentes en el centro de Londres y en particular en torno a los llamados "objetivos blandos", como teatros y museos, en prevención de un ataque de asociados al Estados Islámico.