El dirigente chino transmitió los detalles de esta conversación al grupo de parlamentarios surcoreanos que visitó esta semana Pekín.
Liu Yunshan abogó también por la normalización de las relaciones entre las dos Coreas, destacando que este proceso llevará cierto tiempo.
Al mismo tiempo, rechazó los rumores de la prensa surcoreana sobre una posible visita de Kim Jong-un a China en 2016.
Las dos Coreas formalmente se encuentran enfrentadas después de que la Guerra de Corea (1950-1953) finalizara con una tregua que nunca avanzó hacia un tratado de paz.
Las tensión entre ambas naciones se incrementó bruscamente en 2010 por el hundimiento del buque surcoreano Cheonan y el enfrentamiento armado en la zona de la isla de Yeonpyeong en el Mar Amarillo.
El 24 de agosto ambas Coreas anunciaron la disminución de las tensiones en la península tras días de maratonianas negociaciones. Pyongyang lamentó el incidente provocado por la explosión de minas del 4 de agosto de este año, mientras que Seúl detuvo sus programas propagandísticos en la frontera.