"Dada la intensa confrontación entre Rusia y Occidente, la gente no puede dejar de conectar las alegaciones de la WADA con la situación geopolítica", señala un editorial del diario Global Times titulado "¿Está la política detrás de las acusaciones sobre el escándalo de dopaje en Rusia?".
El medio es escéptico sobre las acusaciones en un contexto de controles estrictos y nula tolerancia social al dopaje.
"Es difícil creer que un departamento estatal ruso podría arriesgarse a apoyar una confabulación de engaño masivo", sostiene.
El diario también pide pruebas concretas contra una acusación sobre "la que no se puede descartar la motivación política" y señala que los escándalos de dopaje masivo son raros.
El ejemplo elegido son las docenas de atletas estadounidenses acusados en 2003 de haber ingerido un esteroide anabolizante, entre ellos la campeona mundial Marion Jones.
"El uso del deporte para fines políticos no es nuevo en Occidente", señala el diario, que cita la investigación de la FIFA tras la adjudicación del Mundial de Fútbol a Rusia o las llamadas a boicotear los Juegos Olímpicos de Invierno de Sochi.
Según el medio, "el dopaje, si consigue ser demostrado, no debe ser tolerado en el mundo de los deportes. Pero mezclar deporte con política es también una lástima".