"Debido a la última decisión de la UE Israel detiene el diálogo diplomático en diversos foros en los que estaban previstos encuentros las próximas semanas", reza la declaración de la entidad de Relaciones Exteriores.
La directiva de la Comisión Europea prohíbe a los países de la UE utilizar el sello "hecho en Israel" en los productos importados de los asentamientos del margen occidental del río Jordán, los Altos del Golán o Jerusalén Este.
La exigencia de definir claramente la procedencia de los productos los convierte, según los israelíes, en diana fácil de boicot y otros tipos de protestas.
Al condenar esta decisión de la UE como una muestra de doble rasero y juego a la campaña internacional para boicotear a Israel, las autoridades hebreas advirtieron que afectará de modo negativo las relaciones bilaterales y las perspectivas de hallar una solución al conflicto del Medio Oriente.