Corbyn declaró meses atrás que nunca pulsará “el botón nuclear” si accede a la Jefatura del Gobierno y la seguridad del Reino Unido está en peligro.
El líder laborista defendió en cambio la “promoción de una convención internacional en armas nucleares que podría conducir a un mundo libre de la amenaza nuclear”.
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Pero, este domingo, el alto cargo militar recordó que el objetivo primario de los arsenales atómicos es disuadir a otros países de entablar un ataque nuclear.
“Todo el tema de la disuasión se apoya en la credibilidad de utilizar (las armas nucleares) y este efecto quedaría completamente socavado”, dijo el general sobre la negativa de Corbyn a autorizar la entrada en acción de los submarinos atómicos si llega a ser primer ministro.
“Cuando la gente dice que no va a utilizar la fuerza disuasiva nuclear, les digo que este disuasión se ejercita cada segundo de cada minuto de cada día y el objetivo es que no se tendrá que utilizar porque se ha logrado disuadir (al enemigo)”, explicó el jefe del Estado Mayor de las fuerzas armadas.
Los parlamentarios tienen previsto votar en 2016 sobre el proyecto de renovación de los submarinos con misiles estadounidenses Trident.
La línea oficial del Partido Laborista se mantiene, de momento, a favor de la moción pese a la abierta oposición de su líder, que fue secundada por la rama escocesa de la formación el fin de semana pasado.
Corbyn ha encomendado una revisión de la política en Defensa y confía en persuadir hacia su postura de desarme unilateral al resto de diputados en Westminster y a los líderes sindicalistas, que temen por la pérdida de trabajos altamente cualificados si el Reino Unido abandona su programa nuclear militar.