Peskov hizo estas declaraciones al comentar las palabras del presidente de EEUU, Barack Obama, quien admitió la posibilidad de que hubiera una bomba a bordo del avión ruso siniestrado en Egipto.
El portavoz presidencial subrayó que el propio mandatario norteamericano "no sacó conclusión alguna" y que solo habló de una hipótesis.
"Solo la investigación puede determinar cuáles son las opciones más probables que llevaron a esa horrible catástrofe, y todavía no tenemos conclusión alguna por su parte", insistió Peskov.
El Airbus A321 de la compañía aérea Kogalimavia que volaba de Sharm el Sheikh a San Petersburgo se estrelló el 31 de octubre en la península egipcia del Sinaí.
Los 217 pasajeros y siete tripulantes que se encontraban a bordo fallecieron en este siniestro, el peor de la historia de la aviación rusa.