"Hay pequeños daños técnicos, pero no hay secuelas de impacto térmico, según la parte egipcia", dijo.
Precisó que los registradores de vuelo están aún precintados.
Sokolov informó que los especialistas rusos participarán en la investigación de la tragedia y en el trabajo de descifrado de las cajas negras.
El avión ruso A-321 de la compañía aérea Kogalimavia que cumplía el vuelo 9268 en la ruta Sharm el Sheikh — San Petersburgo, con 217 pasajeros y 7 tripulantes a bordo se estrelló este sábado en la península egipcia del Sinaí, causando la muerte de todos a bordo.