"Preocupa la creciente actividad de los emisarios del grupo autodenominado Estado Islámico en Afganistán", reza un mensaje de saludo de Shoigú a los asistentes de la conferencia internacional sobre este país centroasiático.
Los sucesos en Siria, agregó, han demostrado que si no se toman medidas colectivas oportunas, la lucha contra el extremismo requiere mayores esfuerzos.
El ministro ha llamado también a la unidad a todos los países para fortalecer la seguridad regional.
En concreto, ha pedido coordinar las acciones en el marco de la Organización de Cooperación de Shanghái para conseguir cambios positivos en Afganistán.
Según los datos del Estado Mayor General ruso, en la nación centroasiática actúan entre 2.000 y 3.000 combatientes del EI y su número aumenta.
En lo que va de año a manos de los terroristas han muerto más de 3.500 personas, un 25 por ciento más que en el mismo periodo del ejercicio anterior.