“Lo único con que podemos responder es reequipar los Iskander con ojivas nucleares; producir bastantes misiles para los aviones de largo alcance, así como modernizar y reequipar los aviones Tu-22M3 con los misiles de crucero de largo alcanze X-555”, dijo Sivkov.
De esta manera, Rusia podría crear una “amenaza nuclear” de mayor escala, agregó.
“También está la opción de aumentar el grupo de defensa antiaérea en la frontera occidental porque los estadounidenses podrán utilizar bombas atómicas usando aviación táctica y, si erigimos una valla potente de sistemas antiaéreos, simplemente serán incapaces de alcanzar su objetivo”, señaló.
Vídeo: Sistema de misiles Iskander en acción
El experto indicó que EEUU modificó las bombas B61 hace varios años pero el Kremlin solo reacciona últimamente.
Subrayó que en toda Europa y, particularmente, en Alemania “el 80 por ciento de la población demanda la retirada de armas nucleares”.
Anteriormente, el canal germano ZDF informó sobre los planes de Washington de desplegar en una base aérea de Alemania nuevas bombas atómicas B61-12, la duodécima versión de la B61 que empezó a fabricarse en los años 1960.
El Ministerio de Defensa de Alemania se negó a comentar la noticia mientras una fuente del Pentágono dijo a Sputnik que EEUU no infringe ningún acuerdo nuclear.
A su vez, el Kremlin prometió tomar contramedidas adecuadas.