"Desde el punto de vista humanitario, si podemos dar pasos, deberíamos hacerlo, y la parte estadounidense también", dijo.
CBS le preguntó sobre el corresponsal de The Washington Post, Jason Rezaian, con doble ciudadanía, iraní-estadounidense, encarcelado en Teherán en julio de 2014.
Rouhaní a su vez recordó que entre los presos de EEUU hay ciudadanos de Irán, la mayoría de los cuales fueron perseguidos por infringir el régimen de sanciones.
"Desde el comienzo mismo calificábamos de ilegítimas las sanciones (…), por lo que consideramos inocentes a quienes las infringieron y calificamos de injusto su encarcelamiento", señaló el presidente de Irán.
Además, EEUU sospecha que el estadounidense Robert Levinson, desaparecido hace ocho años, haya sido secuestrado por los servicios especiales de Irán.
Muchos estadounidenses critican a la actual Administración de su país por no haber vinculado el problema de los presos con la firma del tratado sobre el programa nuclear iraní.
A finales de agosto pasado, el viceministro de Exteriores de Irán, Hasán Qashqavi, declaró que el problema del canje de prisioneros "no está sobre la mesa de negociaciones".