En opinión del canciller húngaro, citado por la agencia de noticias MTI, las autoridades de la Unión Europea prestan poca atención a la protección de las fronteras.
Además, señaló, los líderes europeos "tienen miedo de llamar al pan, pan y al vino, vino".
"Sus acciones se basan en las falsas informaciones que difunden los medios internacionales", dijo Szijjarto.
A partir del 15 de septiembre en Hungría entraron en vigor nuevas leyes de frontera, que incrementaron considerablemente el control de la frontera y las penas por su violación.
En lo que va de año, unos 500.000 refugiados, en su mayoría procedentes de Siria y Afganistán, han alcanzado las costas europeas tras cruzar el Mediterráneo, según datos publicados por la Organización Internacional para las Migraciones.
La Comisión Europea ha anunciado que se trata de la peor crisis migratoria desde el fin de la II Guerra Mundial.