El operativo se realizó luego de que los viajeros alertasen de la presencia de un sospechoso que se encerró con una mochila nada más entrar en el cuarto de baño del tren, que une Ámsterdam con París.
Tras desalojar el tren, las fuerzas especiales de la policía, acompañados de miembros de especialistas en explosivos, lograron detener al hombre, que registró un ataque de ansiedad.
Los medios informan que el detenido no iba armado, aunque las autoridades holandesas no han confirmado estas informaciones.
Las investigaciones de la policía holandesa se centran ahora en el contenido de la mochila.
El pasado mes de agosto, un hombre armado abrió fuego con una arma en ese mismo tren.
El atacante, de 25 años, fue inmovilizado gracias a la presencia de tres soldados estadounidenses, que se encontraban en el vagón, y el resto de los pasajeros, sin que se produjesen víctimas.
Los investigadores franceses creen que detrás del intento del atentado había una motivación islamista.