Así, se prohíbe cubrir de cualquier modo el desarrollo de la investigación, en particular en las redes sociales.
La prohibición se extiende también a los medios de comunicación extranjeros.
Los periodistas pueden publicar solo las declaraciones oficiales de la Fiscalía.
La tragedia se produjo cuando militares y policías egipcios confundieron con un comando terrorista a 22 turistas, mexicanos y egipcios, que viajaban en cuatro vehículos todoterreno en un desierto a 350 km de El Cairo.
Según los últimos datos del Ministerio del Interior de Egipto, tras el ataque ocho mexicanos y cuatro egipcios fallecieron, y 10 personas resultaron heridas.