El número de ciudadanos cubanos interceptados en el mar es de "3.910 desde el pasado 1 de octubre, cuando comenzó el año fiscal", dijeron fuentes de la Guardia Costera.
Estas mismas fuentes especulan con que los inmigrantes podrían temer que el deshielo diplomático propicie el final de la política de "pies secos-pies mojados", que garantiza la residencia en EEUU a los cubanos que logran pisar suelo estadounidense, mientras que deporta a quienes son encontrados en el mar.
Para el Gobierno cubano, esta ley es responsable de "propiciar la emigración y el tráfico ilegal de personas".
En una entrevista que le realizaron en enero de este año, Vidal sostuvo que esta política es la responsable de "propiciar la emigración y el tráfico ilegal de personas".
Luego de 54 años sin relaciones diplomáticas, Cuba y Estados Unidos acordaron restablecer sus vínculos, y el 20 de julio Cuba reabrió su Embajada en Washington; el 14 de agosto, EEUU hizo lo propio en La Habana.
Este viernes, una comisión bilateral comenzará a delinear una agenda de trabajo común.