Los organizadores dieron por terminada la manifestación cerca de la medianoche, pero avisaron que mañana volverían, informa corresponsal de RIA Novosti.
Varias decenas de activistas se quedaron para pasar la noche en el campamento en el centro de la ciudad que ha crecido de unas 60 a más de 150 tiendas de campaña.
Chisinau fue el pasado domingo escenario de protestas en las que participaron el movimiento Demnitate si Adevar (Dignidad y Verdad, DA) y del partido Casa Noastra — Moldova (Nuestra Casa es Moldavia); los representantes del DA celebraron un mitin junto a la sede gubernamental.
Según el Ministerio del Interior moldavo, el mitin reunió a unas 40.000 personas, mientras que sus organizadores aseguran que acudieron más de 100.000 participantes.

Los manifestantes reivindicaron una reunión con el mandatario Nicolae Timofti y el presidente del Parlamento, Andrian Candu, pero éstos se negaron el domingo al prometer comenzar el diálogo esta semana.
Tras reunirse el domingo con los representantes del DA, el primer ministro moldavo Valeriu Strelet recibió la resolución de los manifestantes que exigieron celebrar elecciones parlamentarias anticipadas en marzo de 2016 como muy tarde y crear condiciones iguales para comicios libres.
Las reivindicaciones incluyen también la dimisión del presidente y la elección de un nuevo jefe de Estado a través de elecciones generales.
Sin embargo, Timofty ha descartado su dimisión.