La policía tomó las medidas necesarias para detener a los refugiados; el paso fronterizo de Roszke fue cerrado temporalmente para el tráfico entrante para evitar accidentes.
Solo en el pasado mes de agosto, Hungría recibió a 50.000 refugiados, procedentes en su mayoría de zonas de conflicto como Siria, Irak y Afganistán.
Según datos de la Agencia Europea de Fronteras (Frontex), unos 340.000 inmigrantes llegaron a la Unión Europea en los primeros siete meses de 2015.