Los sociólogos han atribuido estos resultados del sondeo a la victoria de Rusia en Crimea y la influencia de la televisión.
"Los rusos creen que después de perder los años de 1990, hoy tenemos un gran país, recuperamos Crimea y ha aumentado nuestra autoestima", ha señalado el politólogo Alexéi Makarkin, citado por el diario Védomosti.
"Han transcurrido 24 años de esta intentona golpista, ha pasado una generación. En ese entonces mucha gente no comprendió lo que había sucedido. Si se pregunta sobre temas concretos, en el mejor de los casos solo una de cada mil personas podría decir algo comprensible", subrayó Svanidze.
A su vez, el vicedirector del Levada-Center, Alexéi Grazhdankin, ha explicado que los ciudadanos evalúan los sucesos del pasado a través del prisma del presente.
"El conflicto en el este de Ucrania tiene más de dos años y los rusos lo vinculan con la desintegración de la URSS y la intentona golpista de 1991, cuando todo se derrumbó. Esa es la razón por la que mucha gente ve este hecho como una tragedia", concluyó.
El presidente de la Federación Rusa, Borís Yeltsin, encabezó un movimiento contra los golpistas, asumió la dirección del país y firmó unos decretos que calificaron las acciones de este grupo como un intento de golpe de Estado.
Seis miembros de este grupo y otros altos cargos fueron arrestados y juzgados por alta traición. El 23 de febrero de 1994, la Duma de Estado (Cámara baja del Parlamento ruso) los amnistió.