"El acuerdo se ve complicado, pero económicamente viable, aleja el temor y el riesgo de Grexit, garantiza un presupuesto y un paquete de rescate adicional de 35.000 millones de euros", valoró, lo que "incluye un nuevo crédito a largo plazo –en 30 años– del MEDE".
En su opinión se podría hablar incluso de una pequeña reestructuración de la deuda griega y abre nuevas perspectivas para una de mayor calado en un futuro.
Aunque las medidas incluidas en el nuevo acuerdo tienen carácter recesivo, no se puede comparar con el primer y el segundo memorándum, las cuales establecían una corrección del presupuesto del 15 por ciento del PIB en un plazo de 4 años, además del recorte de pensiones y de lo sueldos del 30 al 40 por ciento.