"El Ministerio de Defensa tomará medidas adecuadas de carácter técnico y militar", señaló al indicar que el despliegue "solo confirma las peores sospechas nuestras" en cuanto a contra quién está dirigido este sistema.
Sin embargo, ahora que el problema iraní se ha resuelto, destacó Antónov, no ha habido declaraciones algunas por parte de EEUU sobre el despliegue de su sistema antimisiles en el territorio europeo.
Antónov indicó que Rusia tiene interés en desarrollar su cooperación técnica militar con la OTAN pero solo en pie de reciprocidad.
A la vez advirtió que Rusia no permitirá el debilitamiento de sus Fuerzas Armadas y señaló que emplazará sus equipos militares partiendo de las acciones de otros países.
Recordó que EEUU sigue disponiendo de armas nucleares en Europa, mientras que las armas nucleares de Rusia están desplegadas en su propio territorio.
El tema del despliegue de la defensa antimisiles de EEUU en Europa bajo el pretexto de amenaza iraní es uno de los mayores escollos en las relaciones entre Moscú y Washington.
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Rusia considera que estos planes suponen un riesgo para la seguridad nacional y exige a EEUU garantías políticas de que el escudo antimisiles no apuntará contra su territorio.
