Este miércoles la clínica del dentista amaneció cerrada, nadie responde a las llamadas telefónicas, y en las puertas del local los vecinos de la zona han colocado peluches y flores en señal de protesta por el asesinato del famoso león.
La consulta de Palmer recibió más de 2.000 opiniones negativas en la popular página Yelp, mientras su cuenta de Facebook tuvo que cerrarse por la cantidad de comentarios peyorativos que dejaron los usuarios de la red, además alguien instaló un cartel dirigido al cazador que lo tilda de cobarde y asesino.
El león Cecil, de 13 años, estaba considerado un símbolo nacional de la mayor reserva natural de Zimbabue, el Parque Nacional Hwange, su foto apareció en campañas publicitarias turísticas.
Las autoridades del país consideran que el animal, que agonizó más de 48 horas antes de ser rematado con un arma de fuego, fue cazado ilegalmente, y han abierto un expediente penal contra el dentista estadounidense.
Sin embargo, el dentista da entender que no ve nada especial en su pasatiempo y responsabiliza de lo ocurrido a sus ayudantes, el cazador Theo Bronkhurst y el propietario del coto privado de caza Honest Ndlovu.
Se supone que Palmer les pagó un total de 55.000 dólares por hacer que el animal abandonara el parque nacional y se pusiera al alcance para matarlo.
Las autoridades afirman que los cazadores furtivos intentaron esconder el collar electrónico que llevaba Cécil, pero este fue encontrado posteriormente.
Después del asesinato de Cecil salieron a la luz otros conflictos del dentista con la ley, en particular, la caza furtiva de un oso que realizó en 2006 en su propio país y por la cual resultó multado con 3.000 dólares.
Palemer también resultó acusado de acoso sexual por una exempleada de su consulta y tuvo que pagarle 127.000 dólares, sin admitir siquiera su culpa.