"Tenemos que prestar más atención a los elementos nacionales de nuestra cultura, por lo que sería oportuno obligar a todos los restaurantes menos los especializados a tener en su carta como mínimo el 50% de platos de la cocina tradicional rusa", explica el parlamentario, citado por el periódico.
Según Soloviov, los turistas extranjeros que llegan a Rusia apenas pueden encontrar restaurantes especializados en la cocina rusa, lo que repercute en el prestigio del país.
A su vez, la crítica gastronómica Olga Siútkina opina también que el apoyo estatal podría tener un papel positivo en la oferta de la cocina rusa que "desgraciadamente no está tan desarrollada como lo quisiéramos".