Shoigú precisó que las casas para militares que se levantan en las islas Kunashir e Iturip corresponden a sísmicos para edificaciones.
El ministro agregó que además se levantan hospitales, cines y carreteras para crear condiciones confortables para la vida de los efectivos del Ejército ruso y miembros de sus familias.
Japón reclama cuatro islas del archipiélago –Iturup, Kunashir, Shikotan y Habomai– basándose en el Tratado Bilateral de Comercio y Fronteras que firmó con Rusia en 1855.
Moscú sostiene que tras la II Guerra Mundial, estos territorios fueron traspasados a la Unión Soviética en virtud de varios acuerdos internacionales.
Tokio condicionó la firma del tratado de paz con Moscú a la devolución de estas islas.
Por su parte, Rusia asumió la soberanía de dichos territorios como sucesora legal de la URSS y se niega a revisarla.