Según los datos del periódico, Xiao Yuan, principal conservador de la Academia, confesó al Tribunal que de 2004 a 2006 robó de la galería 143 pinturas, que sacó a subastas. Yuan vendió 125 pinturas.
El empleado gastó los cinco millones de euros procedentes de las ventas en comprar los apartamentos y amueblarlos.
El hombre robó obras de pintores chinos famosos del siglo XX Qi Baishi y Zhang Daqian y del calígrafo del siglo XVII Zhu Da.
Yuan también indicó que no fue el único ladrón en el museo, porque descubrió que algunas copias suyas fueron robadas y sustituidas por otras, de calidad más baja.
Según el hombre, los estudiantes y los profesores pueden sacar pinturas del museo como si fueran libros de una librería, de ahí que prosperara en la Academia la fabricación de copias.