"Podríamos abandonar el Convenio Europeo de Derechos Humanos y otros convenios como sucede hoy en EEUU", dijo el diputado, Leonid Kaláshnikov, quien se desempaña como vicepresidente de la Comisión parlamentaria de Asuntos Internacionales.
Kaláshnikov indicó también que al salir de los acuerdos, Rusia seguiría respetándolos de forma tácita.
Según el diputado, el abandono de por sí no afectaría la participación de Rusia en el Consejo de Europa donde el respeto de los convenios no es la única exigencia para ser miembro de la entidad.
Kaláshnikov mencionó que la PACE se convirtió en una "tribuna para nuestro linchamiento".
Anteriormente, el Tribunal Constitucional de Rusia declaró que sigue permaneciendo bajo la jurisdicción del Tribunal de Estrasburgo y no eludirá el cumplimiento de sus decisiones, pero estas no deben ir en contra de la Constitución rusa.
A su vez, Anne Brasseur expresó su preocupación por esta medida, ya que en su opinión, impulsará un "enfoque selectivo" hacia los veredictos de Estrasburgo.