La empresa británica es socia de dos empresas en el consorcio ganador: la mexicana Sierra Oil & Gas y de la estadounidense Talos Energy.
Argentina ha acusado a varias petroleras extranjeras de actividades exploratorias ilegales en la Cuenca Malvinas Norte, a 200 kilómetros en aguas del Atlántico sur, del archipiélago bajo litigio internacional que los británicos bautizaron como Falklands en el siglo XIX.
La soberanía de Las Malvinas es reclamada por Argentina, y la ONU considera "territorio no autónomo" administrado por el Reino Unido, que desató una guerra en 1982 que terminó con la rendición del gobierno de Buenos Aires, entonces administrado por una dictadura militar.
Esas empresas formaron un consorcio que contrató una plataforma petrolera que inició actividades el pasado 6 de marzo, acusado de contaminación del medio ambiente e importación o exportación de bienes ilegal, indica la denuncia penal argentina.
Premier Oil se ampara en licencias otorgadas por el Reino Unido en la zona de disputa de soberanía, mientras la Organización Latinoamericana de Energía (OLADE) reconoce el derecho de Argentina a aplicar acciones legales contra las actividades de exploración y explotación de hidrocarburos en su plataforma continental.
La histórica primera licitación de campos petroleros en México desde la nacionalización de 1938 quedó por debajo de las expectativas al declararse desiertos 12 concursos de los 14 campos ofertados, y los únicos asignados fueron para el consorcio mexicano Sierra Oil & Gas aliado a la británica Premier Oil y la estadounidense Talos Energy.